- La tecnología será el gran aliado de las familias para mantener el contacto con personas mayores que puedan pertenecer a grupos de riesgo.
- Evitar las visitas no urgentes y cancelar las citas médicas que no sean prioritarias son claves para evitar zonas de potencial contagio.
- Extremar las medidas de higiene es fundamental si estamos en contacto con personas mayores o pacientes que pertenezcan a grupos de riesgo.
Madrid. 27 de marzo de 2020. El coronavirus se ha convertido en una pandemia que actualmente afecta a personas de todo el mundo, especialmente a adultos mayores o pacientes con patologías previas. Las medidas tomadas por los países para la prevención de contagio han derivado en un confinamiento que obliga a muchas familias a mantener la distancia de aquellos seres queridos que pertenecen a los grupos de mayor riesgo.
En este contexto, desde Aegon os damos algunas claves para mimar y cuidar de nuestros mayores tanto si viven solos como en casa, con el fin de evitar y prevenir el contagio.
La tecnología, el mejor aliado
El confinamiento ha traído consigo a separación de muchas familias, unidas tan solo por las videollamadas a través de sus dispositivos móviles y portátiles. "Estamos venciendo a la cuarentena gracias a la tecnología", señala Belén González, directora de Salud de Aegon. "Parece que el distanciamiento social ha generado un movimiento alrededor del mundo que ha unido a personas bajo un mismo objetivo, que es ser responsables y quedarnos en casa para prevenir el contagio", mantiene. Las videollamadas grupales entre miembros de la familia, amigos o parejas, las quedadas para cenar y los juegos interactivos a través del ordenador se han convertido en la nueva forma de entretenimiento en la distancia.
Además de este sistema de llamadas, las aseguradoras y profesionales sanitarios se han aliado con la tecnología para ayudar a aquellos pacientes con algún tipo de necesidad a resolver sus dudas o consultas de la mejor forma posible. "Con el fin de evitar las visitas innecesarias al médico, se han habilitado teléfonos de orientación médica y servicios de cita a través de videollamada, para que aquellos que más lo necesiten puedan recurrir a esos servicios", comentan desde la dirección de Salud de Aegon.
Evitar visitas no esenciales como medida de protección
El ser humano es, por definición, social. En un entorno de cuarentena donde muchas personas se encuentran aisladas de sus familias, parejas o amigos, la necesidad de relacionarse se h imprescindible y se hace complicado mantener el confinamiento. No obstante, esta actitud es la más segura y responsable, sobre todo si visitamos a personas mayores que suelen pertenecer a los grupos de más riesgo de contagio por el virus. "Debemos ser conscientes de la responsabilidad que tenemos para evitar que el virus se siga extendiendo entre las personas y actuar en consecuencia", recuerda Belén González. "Sabemos que no ver a los abuelos durante un tiempo es duro, pero es la mejor forma de protegerlos frente a una posible infección. Si tenemos niños pequeños, debemos ser conscientes de que ellos tienen muchas posibilidades de contagiarse del virus y no presentar síntomas, pero son portadores potenciales que actuarían de fuente de contagio en el caso de que realizásemos una visita fugaz a los abuelos. Lo más recomendable es evitar el contacto directo y cercano con familiares en riesgo".
Asimismo, una de las grandes preguntas durante esta cuarentena ha sido la cancelación de citas médicas programadas con anterioridad. En algunos casos, estas citas no han sido canceladas y para el paciente, sobre todo si es mayor, se presenta una duda: ¿ir o no ir? En esta situación, desde Aegon recomiendan cancelar todas las citas médicas que no sean prioritarias u obligatorias. "No hay mejor forma de prevención que el quedarse en casa", aconsejan desde Aegon. "Los centros de salud y hospitales son fuentes potenciales de contagio, sobre todo para grupos de riesgo. Por ello, debemos evitar cualquier visita que no sea imprescindible".
Mantenerse activo para mejorar el estado de ánimo
Estar en casa confinados puede generar ansiedad, sobre todo en las personas mayores acostumbradas a salir a la compra, a la farmacia o simplemente a dar un paseo. En los casos en los que estas personas vivan solas, es fundamental animarlos a mantenerse activos y ágiles para no perder los ánimos. "A raíz de la cuarentena han surgido distintas iniciativas en la televisión que fomentan el deporte y la actividad física en casa", señala Belén González. "Estas propuestas son fácilmente accesibles a través de la televisión y ayudan a los más mayores a desconectar de la saturación de los informativos y a activar el cuerpo con una rutina de ejercicio físico adaptada a ellos".
Asimismo, es recomendable que se realicen actividades y ejercicios para trabajar la mente y la concentración. "Aunque la televisión es la reina del entretenimiento, en estos momentos es importante realizar actividades que trabajen nuestra mente para desconectar de las pantallas y de la información que recibimos diariamente a través de los medios", recomiendan desde Aegon.
Máxima higiene para prevenir el contagio
En ocasiones, las personas mayores cuentan con cuidadores que los asisten diariamente, les hacen la compra, limpian la casa y les ayudan con la movilidad en su hogar. Tanto si el cuidador es una persona especializada como si es un familiar, cuando convivimos o trabajamos con mayores debemos mantener unas medidas de higiene extremas para evitar tanto el contagio propio como contagiar a la otra persona. "En una situación como en la que nos encontramos, ayudar a personas mayores que viven solas es prioritario para que ellas no tengan necesidad de salir a la calle a hacer la compra o ir a la farmacia", señala Belén González.
Entre algunas de las medidas más escuchadas, desde Aegon recomiendan el lavado frecuente de las manos durante al menos veinte segundos o, en caso de que no se puede acceder a un baño, desinfectarlas con gel antibacterial a base de alcohol, así como limpiar en profundidad aquellos muebles y objetos que se toquen con frecuencia, como la cartera o el móvil. "Si tenemos contacto directo con una persona que pertenezca a un grupo de riesgo, toda medida de prevención es poca", mantiene Belén González.